En Tuxtla Gutiérrez, ese escucha el sonar de las marimbas, la “Costeñita” una agrupación de cinco integrantes que salen a las calles del centro de Tuxtla Gutiérrez y ejecutan este instrumento regional.
José Hernández comenzó a los 13 años a ejecutar este instrumento, actualmente tiene 30 años enarbolando la música regional, a pesar de no ser parte de familia de músicos, su gusto fue tanto que busco aprenderlo.
“Nace de un gusto porque en mi familia no hay nadie que se dedique a la música, es el gusto de la música regional, veía en los compañeros su trabajo y me gusto y cada día creció mi amor por la música y aquí estamos”.
Para ellos la temporada de COVID marcó un antes y un después, pues con la necesidad buscaron salir a las calles y poder obtener monedas que le ayudará al sustento familiar, antes d la pandemia solo cubrían eventos por lo grande de los instrumentos.
Con el apoyo de un diablito donde cargan la batería y las bocinas y otros llevan a cuestas la marimba por diferentes puntos estratégicos del centro de la ciudad donde se colocan para ejecutar piezas regionales.
“Ahora que paso todo lo de la pandemia tuvimos que salir a buscarle porque se puso un poco difícil”.
A seis años de haber nacido una agrupación, se consolidan en la capital, pues al escucharlos la gente los contrata en la calle para sis eventos familiares, ha sido no solo el sustento de su hogar, sino una plataforma para demostrar su trabajo.
A pesar de que en Tuxtla Gutiérrez las temperaturas rebasan los 40 grados, la ciudadanía agradece la labor de estos jóvenes que cambian el panorama de las compras para el hogar y el trabajo día a día.
Christian Chacón es el fundador de esta agrupación y de la idea de salir a las calles, una forma diferente, pero que convirtió esto en un trabajo de tiempo completo y estabilidad familiar.
“Es complicado, pero poniéndole ganas y empeño, pues todo es posible y sale uno adelante, depende de uno decir sí para salir adelante” comentó José Hernández.
Hacer música regional es lo mejor, disfrutar lo que haces, no se siente como trabajo, agregó José.
La marimba para Chiapas es un símbolo musical indiscutible en la cultura del estado, es un instrumento armonioso que enlaza sus emociones y vive en cada alma chiapaneca. La primera marimba hecha en Chiapas fue el 9 de octubre de 1545 en la hacienda de Santa Lucía, Jiquipilas, por el chiapaneco Corazón Borraz.
