Comuneros de Nuevo Bochil denuncian que municipio les niega el acceso al agua pese a obra ya auditada


Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.— Habitantes del ejido Nuevo Bochil denunciaron que el presidente municipal, Líbano (apellido no referido), se niega a suministrarles agua potable a pesar de que la obra hidráulica destinada a la comunidad ya fue auditada y validada por la Auditoría Superior del Estado (ASE).
Alegría Bautista Hernández, suplente del presidente del Comisariado Ejidal, expuso que desde 1996 las más de 600 a 700 familias que conforman el ejido viven en una situación crítica debido a la falta de agua, obligadas a comprar el recurso para consumo humano y para sus animales.
Después de años de gestiones, se construyeron dos tanques de almacenamiento y se introdujo tubería de conducción. No obstante, con el cambio de administración, el alcalde condicionó el suministro a una auditoría.
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“La auditoría ya se hizo, ya se concluyó y fue entregada al Congreso del Estado en noviembre. Aun así, el presidente municipal insiste en que no nos va a dar agua, que le hagamos como le hagamos”, denunció Bautista Hernández.
El representante ejidal afirmó que la comunidad envió oficios al gobernador del estado y a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum. La Presidencia turnó la petición a Conagua, pero la dependencia únicamente ha requerido informes al municipio sin resolver la demanda.
“La recomendación de la presidenta se fue al bote de basura. No han hecho absolutamente nada. Nuestra gente sigue sufriendo y nuestros derechos humanos siguen siendo violentados”, reprochó.
Los pobladores señalaron que el desabasto impacta también en las escuelas —kínder, primaria y secundaria—, donde los niños enferman ante la falta de agua para higiene básica.
“Sufrimos los 365 días del año. O compras agua y te quedas sin comer, o comes y te quedas sin agua. Así vivimos”, agregó Bautista Hernández.
Ante la falta de respuesta, los comuneros realizaron una manifestación pacífica y advirtieron que, si no hay solución, se movilizarán hacia el Congreso del Estado y posteriormente hacia el aeropuerto para que su exigencia llegue directamente a la Presidencia.
“Lo único que pedimos es que se respete nuestro derecho humano al agua. No nos vamos a quedar callados”, reiteró.





