Municipios
Tendencia

¿Justicia con precio? En Chiapas se pidieron tamales para buscar a Jonathan

La desaparición de Jonathan Estrada reveló prácticas indignantes de autoridades que exigieron comida a cambio de hacer su trabajo.

Corrupción sin máscaras en una tragedia

El caso de Jonathan Estrada, joven desaparecido en julio de 2023, ha desatado indignación nacional tras revelarse que funcionarios de Chiapas pidieron tamales para “agilizar la búsqueda”. Su hermana, Magdalena, denunció que personal de la institución le solicitó 30 tamales —15 de mole y 15 de chipilín— como condición para realizar diligencias básicas. Pese a cumplir la exigencia, el apoyo no llegó.

“Búsquenlo ustedes por su cuenta y si no lo encuentran, regresen”, fue la respuesta que recibió Magdalena de las autoridades, obligándola a unirse al Colectivo de Madres en Resistencia, un grupo de mujeres buscadoras que realizan el trabajo que el gobierno ha ignorado.

El hallazgo que no vino de la Fiscalía

Los restos de Jonathan fueron encontrados en un barranco por un conocido de la familia. A pesar de que el hallazgo fue comunicado, las autoridades solo actuaron después, realizando dos pruebas genéticas. Fue hasta el 23 de mayo de 2025 que se confirmó que los restos pertenecían a Jonathan. Aún así, las dudas prevalecen.

“La ropa no era de él, él era delgado y la ropa era de una talla más grande. Pero la Fiscalía solo dice que es positivo, que es tu hermano y lo aceptes”, denunció su hermana. La desconfianza hacia las instituciones no hizo más que crecer, dejando a la familia sola en su búsqueda por la verdad.

Un adiós lleno de preguntas sin respuesta

El 27 de mayo, familiares y amigos despidieron a Jonathan en un funeral cargado de dolor, impotencia y resignación. La familia tomó la decisión de aceptar el dictamen forense no por certeza, sino para detener el sufrimiento. “Al menos ahora tenemos un lugar donde llorarlo”, expresó Magdalena.

Sin embargo, mientras ellos cierran un ciclo, muchas otras familias continúan sin respuestas. Las integrantes del colectivo al que acudió Magdalena siguen esperando avances en sus propios casos. El patrón de impunidad, negligencia y revictimización se mantiene.

Artículos Relacionados

Deja un comentario

Back to top button