El astro surcoreano Son Heung-min deja la Premier League y se une al LAFC en una transferencia que promete revolucionar la MLS y la comunidad coreana en California.
Un fichaje de impacto global
La llegada de Son Heung-min al LAFC marca un hito en la historia de la MLS. Con 33 años y una exitosa trayectoria de 10 temporadas en el Tottenham de la Premier League, el delantero surcoreano se convierte en el fichaje más caro del fútbol estadounidense, con una cifra que ronda los 26 millones de dólares. Esta contratación no solo potencia al LAFC, sino que también refuerza el posicionamiento del fútbol coreano en el panorama internacional.
Son, ídolo dentro y fuera de la cancha
Con más de 120 goles en Inglaterra y una Bota de Oro compartida con Mohamed Salah, Son no solo destaca por su rendimiento deportivo, sino también por su carisma, humildad y habilidad para conectar con distintas audiencias. Habla inglés fluidamente y es un referente positivo dentro y fuera del campo, lo que lo convierte en una figura ideal para campañas de marketing y expansión de la MLS a nivel global.
Un golpe de efecto para la comunidad coreana
La comunidad coreana en Los Ángeles, la más grande de EE. UU., celebra la llegada de Son como un evento histórico. Comparado con las contrataciones de figuras como Chan Ho Park en los Dodgers, se espera que el arribo del delantero impulse la venta de derechos televisivos, patrocinios y mayor atención mediática, tanto en Estados Unidos como en Corea del Sur.
Un refuerzo estratégico para la selección de Corea
Además del beneficio deportivo y comercial, el fichaje también tiene impacto para la selección de Corea del Sur. Con el Mundial de 2026 acercándose, Son aprovechará su estancia en EE. UU. para adaptarse al clima, los horarios y los viajes, mejorando sus condiciones para rendir en la máxima competencia internacional. Como capitán del equipo nacional y referente, su presencia en Norteamérica es estratégica.
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LAFC sigue apostando en grande
El equipo angelino continúa consolidándose como potencia en la MLS. Además de Son, ha incorporado figuras de talla mundial como Hugo Lloris, Olivier Giroud y Gareth Bale. Con este fichaje, el LAFC refuerza su delantera tras una racha de bajo rendimiento ofensivo, y da un golpe mediático que podría atraer a más estrellas asiáticas al campeonato estadounidense.
Más que fútbol: un fenómeno cultural
El efecto Son Heung-min va más allá del terreno de juego. Su presencia se traduce en nuevas oportunidades para la MLS en Asia, mayor visibilidad de la liga en mercados emergentes y una conexión profunda con las comunidades coreanas y asiático-americanas. Su fichaje puede marcar el inicio de una nueva etapa en la globalización del fútbol estadounidense.
