En Tuxtla Gutiérrez, grupos de mujeres feministas, a madres en resistencia, sociedad civil marcharon para acompañar a la familia de Lupita, para pedir justicia y esclarecimiento de los hechos que envuelven el caso que logró conmocionar a Chiapas.
Lupita era una joven de 12 años que junto a su familia se dedicaban a la venta de chicharrones y palomitas en la capital Chiapaneca.
Lupita era originaria de Berriozábal y cada mañana bajaba junto a su familia a vender casa por casa, o establecimiento por establecimiento, sus productos, sin embargo, el pasado 19 de octubre desapareció.
Luego de que al Fiscalía General de Chiapas encontrara el cuerpo en el domicilio ubicado en el barrio colon la casa marcada con el número 550, de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el pasado 23 de Octubre, el feminicida se encontraba prófugo.
La noche del 27 de octubre la dependencia de investigación señaló que se encontró muerto y en estado de descomposición a Víctor José Carrera, presunto feminicida de la pequeña Lupita.
En esta marcha, que inició en el Teatro de la Ciudad y terminó en la Fiscalía General de Chiapas, la única exigencia era de justicia.
Las mujeres pedían una mesa de comunicación con autoridades de la Fiscalía donde pedirían información acerca del caso, que les informaran de cómo dieron con el paradero del presunto feminicida y la exigencia de una justicia integral para la familia.
Luego del término de la protesta un grupo de feministas tiraron mallas de este edificio de investigación, realizaron pintas y realizaron quemas sobre la banqueta del portón principal de este lugar.
