A tan solo 12 kilómetros del encantador Pueblo Mágico de Comitán, se encuentra Tzimol, un pintoresco y tranquilo poblado que se está convirtiendo en un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y la aventura. Ubicado en un hermoso valle de cañaverales, este lugar es el punto de partida ideal para explorar las impresionantes 3 Tzimoleras, un conjunto de cascadas que prometen una experiencia única.
El viaje hacia este paraíso natural comienza en el corazón de Tzimol. Para llegar a las cascadas, se recomienda utilizar vehículos 4×4, ya que el camino está lleno de emocionantes desafíos que permiten a los visitantes disfrutar de la abundante vegetación y las pozas naturales que adornan el trayecto. La experiencia comienza a vivir desde que se deja el pueblo, sumergiéndose en un entorno de belleza natural incomparable.
Una vez en las 3 Tzimoleras, los visitantes son recibidos por aguas color turquesa que invitan a un refrescante chapuzón. La primera de las cascadas ofrece un espacio perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Al caminar por la orilla del río, se descubre la segunda cascada, una caída espectacular de 45 metros que deja sin aliento a quienes la contemplan.
Para los más aventureros, el camino hacia la tercera cascada implica nadar en una poza a contracorriente. Este último tramo es especialmente emocionante, ya que detrás de la caída de agua se oculta una cueva donde los visitantes pueden maravillarse con la vista del agua descendiendo desde arriba, un espectáculo realmente impresionante.
Además de las 3 Tzimoleras, el municipio ofrece otros atractivos turísticos como el Centro Recreativo La Rejoya, un lugar ideal para disfrutar de un día de campo en medio de la naturaleza. Aquellos que buscan emociones fuertes pueden explorar las cascadas de San Vicente y El Chiflón, perfectas para actividades de turismo de aventura como el cañonismo y el descenso a rappel.
