MunicipiosTuxtla
Tendencia

El Organillo, instrumento que no pasa de moda en Chiapas

Fue en el siglo XVI, luego de conquista de los españoles, que comenzaron a establecerse en Mexico, con esta construcción de un hogar, lo españoles comenzaron a introducir su musica, así fue como el organillo llego a México.

El organillero es el ejecutor de esta caja musical, es un músico itinerante, que se gana el sustento ejecutando un instrumento musical autómata, que se constituye por un órgano de tubos portátil y un sistema mecánico de relojería, conocido coloquialmente como organillo.

Esta caja musical, tiene como función principal amenizar las plazas públicas de la ciudad, llevando un repertorio de cinco o mas piezas populares, que generalmente te invitan a bailar.

Te puede interesar:

El organillero vive de las aportaciones de la ciudadania, es por ello que se desplaza de uno a otro lado, buscando publico a quien acompañar dentro de alguna faceta que estén realizando en la ciudad, la espera del semáforo, las filas en el banco, esperando turnos para los tramites o simplemente en la espera de alguien o matando tiempo en algún punto de la ciudad.

En Tuxtla Gutiérrez está música callejera comenzó a renacer, puedes deleitarte en los mercados, en los parques, sobre las calles mas concurridas o en algún restaurante.

Francisco es uno de los organilleros que deleita a los Tuxtlecos en los alrededores del Parque Central, siempre acompañado su caja musical, y encima de ella un pequeño canasto que recolecta lo que la ciudadania le otorga, si observas con detenimiento, podrás recibir el saludo del bonito que siempre reposa en este organillo, lo que sin duda te robara una sonrisa.

Esta mañana, la gente caminaba a uno y otro lado, con el rostro serio y un poco encajado por los rayos del sol, de pronto una melodía se activo, es el recuerdo del pasado que se resiste a morir… don Francisco ejecuta el organillo, y la gente alrededor busca de donde proviene ese sonido que relaja, te brinda alegría a pesar de la carrera del día, de la molestia que ejerce los fuertes rayos del sol, es como una caricia al corazón que sale por unos minutos de la rutina.

Cuahutemoc Avilez, no dudó en pararse algunos minutos a deleitarse con este instrumento, señaló que le recuerdan a su tiempo de estudiante en la Ciudad de México, cuando los jóvenes que tenían mayor economía conquistaban al ritmo de la marimba y del mariachi, los jóvenes con menos recursos llevaban el organillo y con solo cinco canciones se las arreglaban para conquistar a la mujer que les gustaba.

Francisco Gómez Gómez, es originario de Ocosingo, a su llegada a la capital buscó una oportunidad para ganar dinero, aunque pasó por muchos lugares, encontró esta oportunidad la de ser un organillero, reconoce que aunque es como una caja musical debe esperar a que la melodía termine para poder cambiar de música, son cinco las melodías con las que cuenta la caja musical.

En un día complicado puede obtener hasta 500 pesos y en un día bueno las ganancias se duplican, el reto de este trabajo es el de cargar el instrumento por las calles de Tuxtla Gutiérrez.

El organillo pesa 60 kilos y la destreza de quien lo ejecuta consiste en encontrar los puntos importantes de la ciudad para ejecutar este instrumento, es un instrumento que se resiste a desaparecer y que actualmente es ejecutado por cualquier persona pues es de fácil ejecución.

Por : Alejandra Chávez

Artículos Relacionados

Deja un comentario

Back to top button