En una inesperada sacudida, un sismo preliminar de magnitud 5.8, localizado a tan solo 25 kilómetros al sur de Chiautla de Tapia, Puebla, hizo temblar la Ciudad de México. La sorpresa radica en que en algunas zonas, los ciudadanos percibieron el temblor antes incluso de que se activara la alerta sísmica.
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Martí Batres, jefe de gobierno capitalino, compartió la información actualizada: “Se ajusta el cálculo a 5.8 grados. La alerta sonó muy rápidamente debido a la cercanía del epicentro”. Este inusual evento sismológico ha generado inquietud entre los habitantes de la capital y resalta la importancia de la vigilancia constante ante la actividad sísmica en la región.
El temblor, con epicentro en Puebla, no solo puso a prueba la rapidez del sistema de alerta, sino también la capacidad de reacción de los residentes de la Ciudad de México. Este incidente subraya la necesidad de estar siempre preparados y resalta la imprevisibilidad de los eventos sísmicos en la zona.
Expertos en sismología están evaluando la situación para proporcionar información más detallada sobre el impacto del temblor y cualquier posible réplica. Mientras tanto, la comunidad se mantiene en alerta y las autoridades instan a la calma y a seguir los protocolos de seguridad establecidos.
