Coatíes de barro: el arte que da vida a la fauna mexicana
En la comunidad de Chililico, Hidalgo, artesanos moldean figuras de coatíes en barro, fusionando tradición, naturaleza y creatividad en cada pieza única.
En el corazón de Hidalgo, la localidad de Chililico es reconocida por su rica tradición alfarera. Entre sus creaciones más distintivas se encuentran los coatíes de barro, figuras que capturan la esencia de este animal emblemático de la región. Cada pieza es elaborada a mano, reflejando la dedicación y el talento de los artesanos locales.
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La elaboración de estos coatíes comienza con la recolección de barro de yacimientos cercanos, como Zocuilteco y La Peña. Una vez en los talleres, el barro se limpia, se amasa y se moldea cuidadosamente. Los artesanos utilizan herramientas tradicionales, como el tamascoyanti y el atet, para dar forma y pulir las figuras. Después, las piezas se decoran con pigmentos naturales y se cuecen en hornos alimentados con leña, proceso que les confiere su característico acabado.
Estos coatíes de barro no solo son una expresión artística, sino también un símbolo de la identidad cultural de Chililico. Su elaboración transmite conocimientos ancestrales y fortalece el vínculo entre la comunidad y su entorno natural. Para los visitantes, adquirir una de estas piezas es llevarse un fragmento del alma de Hidalgo.
