Richard Hart se disculpa tras afirmar que en México “no existe la cultura del pan”
El dueño de Green Rhino reconoció su error tras la viralización de un podcast donde criticó la harina, los bolillos y el pan dulce nacional; asegura que busca aprender y respetar al país.
El reconocido panadero británico Richard Hart, propietario del establecimiento “Green Rhino” ubicado en la colonia Roma Norte de la Ciudad de México, emitió este lunes una disculpa pública dirigida al pueblo mexicano. Esto ocurre tras la viralización de una serie de comentarios despectivos realizados en un podcast, donde aseguró que en México “no existe la cultura del pan”, además de criticar severamente la calidad de los insumos locales y menospreciar productos icónicos de la dieta nacional como el bolillo y el pan dulce.
Polémica viral por comentarios despectivos
La controversia estalló en redes sociales luego de que usuarios rescataran fragmentos de una entrevista que Hart concedió al podcast PopFoodie Radio en abril del año pasado. En dicha conversación, el panadero vertió opiniones que fueron calificadas como ignorantes y ofensivas por la comunidad gastronómica y el público en general.
Entre sus declaraciones, Hart sostuvo que la harina mexicana es de “mala calidad” y se refirió a las tradicionales tortas mexicanas afirmando que están hechas con “pan feo”, en alusión al bolillo. Además, desestimó el valor del pan dulce, asegurando tajantemente: “Ni es pan; es pastel”. Estas palabras generaron una ola de indignación, especialmente considerando que Hart opera un negocio en una zona de alta plusvalía en la capital del país.
“Soy un invitado”: la postura del panadero
Ante la presión mediática y el rechazo social, que incluso llevó a la cuenta de Instagram de Green Rhino a desactivar los comentarios para frenar los ataques, Richard Hart difundió un comunicado oficial. En el texto, el británico asume la responsabilidad de sus palabras y ofrece una retractación.
“He escuchado la conversación en redes y he leído sus mensajes. Quiero ofrecer una disculpa clara y sincera. Me equivoqué, y lo lamento profundamente”, expresó Hart. En su mensaje, reconoció su falta de tacto y entendimiento sobre su posición como extranjero en el país: “Mis palabras no reflejaron ese respeto, en este país soy un invitado y olvidé actuar como tal”.
Trayectoria internacional y llegada a la Roma
El nombre de Richard Hart no es menor en la industria culinaria global, lo que hizo que sus críticas resonaran con mayor fuerza. Su carrera despegó a principios de los años 2000 en la famosa Tartine Bakery de San Francisco, y posteriormente consolidó su prestigio al cofundar Hart Bageri en Copenhague junto al aclamado chef René Redzepi, del restaurante Noma.
Hart reside en la Ciudad de México desde 2023, año en que comenzó a gestar el proyecto de Green Rhino, el cual abrió sus puertas apenas a finales de junio de este año. En entrevistas previas, había comparado la efervescencia gastronómica de México con la de Dinamarca, asegurando que el país estaba “en llamas” en términos culinarios. Sin embargo, su reciente apertura se ha visto empañada por la resurrección de sus opiniones pasadas.
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El debate sobre la gentrificación y el respeto cultural
El incidente ha reavivado el debate sobre la gentrificación en colonias como la Roma y la Condesa, donde la llegada de extranjeros y negocios de alto perfil a menudo choca con las tradiciones locales. La crítica de Hart fue percibida no solo como una opinión culinaria, sino como una falta de respeto a la identidad cultural de un país que cuenta con una rica tradición panadera, desde las panaderías de barrio hasta el pan de feria y ceremonial.
Hart aseguró en su comunicado que se enamoró de la gente de la capital desde su llegada, pero admitió que falló en comunicar ese aprecio. “No espero que una disculpa borre el agravio causado, pero sí quiero asumir la responsabilidad de aprender y corregir”, señaló.
Compromiso de rectificación
Para cerrar su mensaje, el panadero británico se comprometió a cambiar su actitud y a valorar verdaderamente la gastronomía del lugar que ahora habita. “Aprenderé de esta lamentable experiencia y me esforzaré por hacerlo mejor cada día”, concluyó, prometiendo demostrar con acciones el respeto que la cultura mexicana merece. Queda por ver si esta disculpa será suficiente para recuperar la confianza de los consumidores locales.
