Iglesia del Niño de Atocha en Tuxtla: historia y supuestos fenómenos paranormales
Vecinos del histórico barrio Niño de Atocha aseguran presenciar figuras misteriosas y sucesos inexplicables en el templo chiapaneco.
La Iglesia del Niño de Atocha, ubicada en uno de los barrios más antiguos de Tuxtla Gutiérrez, ha sido escenario de relatos sobre apariciones y fenómenos paranormales, principalmente durante la noche, que se han viralizado en redes sociales y forman parte de la tradición oral del lugar.
Fenómenos inexplicables en un templo histórico
Habitantes del tradicional barrio Niño de Atocha aseguran haber sido testigos de sucesos extraños en la iglesia ubicada sobre la Novena Norte, entre Cuarta y Quinta Poniente. En plataformas como TikTok circula un video donde se observa la supuesta figura de una persona asomándose por una de las ventanas del templo durante la noche.
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Los testimonios señalan que los hechos paranormales se registran principalmente entre medianoche y las 3:00 a.m., e incluyen apariciones de una monja, un cura ahorcado y figuras que llaman a los niños a jugar. Algunos vecinos afirman que un antiguo cuidador del templo documentó episodios sobrenaturales durante los diez años que trabajó allí.
Historia del barrio y del templo
El barrio Niño de Atocha es uno de los más antiguos de Tuxtla Gutiérrez, fundado en 1871 como Barrio Cuchitán por familias provenientes del Istmo de Oaxaca. Más tarde se incorporó al Barrio Colón y en 1934 el sacerdote Jesús Trejo introdujo el culto al Santo Niño de Atocha, originario de España, con fuerte tradición en Zacatecas.
La construcción de la ermita actual fue impulsada por Doña Guadalupe Téllez sobre una pequeña lomita, y hoy es uno de los principales puntos de visita durante las festividades del 1 al 6 de enero. Fuera de estas fechas, los relatos sobre sucesos inexplicables han cobrado notoriedad, convirtiéndose en parte de la identidad oral del barrio.
Los vecinos coinciden en que las historias de apariciones y sonidos extraños continúan entrelazadas con la devoción y la historia del barrio, reforzando un ambiente donde la fe y las leyendas coexisten generación tras generación.
