Con marcha piden el cierre de cantinas y el establecimiento de la ley seca
Feligresía católica marchó en Chalchihuitan con el objetivo de manifestarse en contra de la apertura de cantinas

Feligresía católica marchó en Chalchihuitan con el objetivo de manifestarse en contra de la apertura de cantinas y pidieron el cierre de las mismas y el establecimiento de la ley seca y se frene la venta de drogas pues esto solo vulnera a las mujeres que sufren violencia, la cual ha aumentado en los últimos días.
Fueron alrededor de mil habitantes que forman parte de la parroquia de San Pablo Chalchihuitan quienes a través de un documento leído pidieron a las autoridades estatales su intervención y realizar el cierre de cantinas, el establecimiento de ley seca y que se frene la venta de drogas.
En últimas fechas reconocieron que esto ha incrementado la violencia contra las mujeres en la cabecera municipal y sus comunidades.
“En lo que va del año vemos cómo va creciendo el número de las cantinas en la cabecera municipal y en los cruceros de caminos en todo el municipio; en las calles se percibe el aumento de personas en estado de ebriedad, los jóvenes son los más vulnerables; el Estado debe garantizar su educación y salvaguardar su integridad por medio de iniciativas que los incentiven con mejores oportunidades de vida, tanto laborales y de educación; no normalicemos la pobreza, que es injusticia de unos cuantos” señalaron a través de un documento leído.
Señalaron que estas actividades destruyen el núcleo familiar, a la persona que lo realiza y las consecuencias son graves e irreparables: accidentes automovilísticos, suicidios, homicidios, feminicidios, división, prostitución y violencia, especialmente hacia la mujer y los niños, y trae mas pobreza.
Las mujeres participantes agregaron “ser mujer y ser indígena es un orgullo para nosotras, pero ser pobre y recibir violencia como si fuéramos objetos es ya una violencia que rebasa, que lastima y que incomoda, no podemos seguir estando calladas permitiendo que pasen sobre nosotras, por lo levantamos la voz”.
Pidieron a las autoridades de las tres órdenes de gobierno que pongan especial atención en los bailes o eventos masivos del pueblo.
“Pongan atención en las conocidas cantinas y puntos de venta clandestinos, que posiblemente se vendan drogas; queremos ley en nuestro municipio. Que ya no se venda alcohol. Queremos que la Secretaría de Salud tome cartas en el asunto sobre esta problemática en nuestro municipio.
Que el gobierno estatal ponga mirada firme en Chalchihuitán, olvidado y empobrecido por el mismo sistema”.
Chalchihuitan, uno de los municipios más marginados del país, ocupa el octavo lugar en pobreza.