El problema migratorio sigue permeando en los municipios de Ciudad Hidalgo y Tapachula, lugares que ocupan para sobrevivir y tramitar sus documentos migratorios que les permita continuar su paso a la frontera norte del país, dijo Alejandro García, integrante del grupo social Unidad Ciudadana en la Perla del Soconusco.
Añadió que, COMAR y el INM se han visto rebasados para dar atención a los miles de migrantes que brincaron el río Suchiate y pasaron el filtro de los grupos delincuenciales organizados, quienes han tomado el control de la frontera sur y obligan a los indocumentados a pagar hasta mil 700 dólares por permitirles el paso hacia Tapachula, luego les ponen un sello en el brazo para que puedan transitar por territorio mexicano con plena libertad.
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Estando en Tapachula el problema se recrudece, debido a la falta de fuentes de trabajo que les permita sobrevivir mientras tramitan su cita de CBP One, que la mayoría de las veces tarda varios meses para recibirlo; muchas veces, desesperados forman caravanas y se van caminando por la carretera costera, jugándose el todo por el todo, apuntó el entrevistado.
Hay quienes piden asilo como refugiados y deciden quedarse a vivir en Tapachula, al no encontrar trabajo se ven obligados a pedir limosna, delinquir o prostituirse en los más de mil 500 antros que funcionan día y noche en este municipio de la costa de Chiapas ,generando el problema de la insalubridad por la falta de control sanitario a quienes ejercen el oficio más antiguo del mundo y terminan formando una cadena de muerte con enfermedades como el Sida, terminó diciendo el también empresario hotelero, Alejandro García.
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