El fenómeno lingüístico del voseo en México es especialmente destacado en el estado de Chiapas y, en menor medida, en Tabasco. A diferencia de otras regiones del país donde predomina el uso del pronombre “tú”, en Chiapas es más común el uso del “vos”, considerado una forma normal de expresión, sobre todo en ciudades como Tuxtla Gutiérrez, Comitán de Domínguez y San Cristóbal de las Casas.
El voseo tiene sus raíces en el siglo XVI en América, surgiendo como una fusión de formas del “vos” antiguo y el “tú”.
Hay tres tipos de voseo, siendo el más común en Chiapas el voseo pronominal verbal, que se distingue por sus formas verbales monoptongadas como “cantás”, “temés” y “venís”. Esta forma de hablar refleja una rica historia lingüística que se ha mantenido a lo largo del tiempo.
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El primer registro escrito del voseo se encuentra en la “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España” de Bernal Díaz del Castillo, donde se transcribe el habla de marineros en 1568.
En España, a partir del siglo XVII, se abandonó el uso del “vos” en favor del tuteo, que ya existía, generalizándose su uso.
Durante la Colonia en América, coexistieron el tuteo y el voseo generalizado, especialmente en las regiones montañosas.
Las áreas más aisladas y con menos influencia cultural adoptaron el voseo, mientras que las regiones bajas y el Caribe, con fuertes lazos culturales y comerciales con España, adoptaron el tuteo. Por ejemplo, en Costa Rica se tuteaba durante la Colonia, pero a principios del siglo XIX el voseo se fue dejando en el habla popular.
En Chiapas, el voseo persiste en gran medida debido a su cercanía con Guatemala y su arraigada tradición lingüística.
Estudios realizados en 2009 demostraron que aproximadamente el 75% de la población en Chiapas utiliza el voseo, siendo parte integral de su identidad lingüística y cultural.
