Aunque tu signo solar es el más conocido, no siempre es el que define por completo tu personalidad. Hay una parte de tu carta natal que tiene más peso e influencia. ¿Sabes cuál es?
¿No eres “tan” como tu signo solar? Es normal
Mucha gente se siente confundida cuando no se identifica del todo con su signo solar. Esto pasa porque la carta natal completa tiene muchos otros elementos que influyen en tu forma de ser. Lo más común es que alguna de estas tres partes sea la dominante:
- Tu signo ascendente (la forma en que te muestras al mundo).
- Tu signo lunar (cómo procesas tus emociones).
- O bien, el signo que más se repite en planetas clave.
¿Cómo saber cuál es tu signo dominante?
No hay que ser astrólogo profesional. Aquí te van 3 pasos fáciles para identificar qué parte de tu carta es la más poderosa:
1. Fíjate en las repeticiones
Revisa cuántos planetas tienes en cada signo. Si hay más de 3 en un mismo signo (por ejemplo, sol, venus, marte en Capricornio), probablemente ese signo domine tu personalidad.
2. Analiza tu ascendente
El ascendente es lo primero que los demás perciben de ti. Si tienes muchas cualidades físicas o actitudes de ese signo, puede que este esté dominando tu carta.
3. Revisa los planetas personales
Los planetas como el Sol, la Luna, Mercurio, Venus y Marte influyen mucho en tu forma de ser y amar. Si están agrupados en un solo signo o casa, esa energía marcará tu comportamiento diario.
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¿Y las casas astrológicas?
Otro factor importante es la casa con más planetas, especialmente si están en casas angulares (1, 4, 7 y 10), ya que estas representan áreas clave: identidad, hogar, relaciones y vocación. Si tienes muchos planetas en la casa 1, por ejemplo, tu identidad personal será una parte muy dominante de tu carta.
¿Y si no entiendo mi carta natal?
Hay muchas páginas o apps que te dan un desglose claro. Fíjate en el signo que más se repite o donde se ubican tus planetas personales.
¿Por qué importa?
Conocer tu signo dominante puede ayudarte a entender por qué actúas diferente a otros del mismo signo solar, y también por qué conectas tan bien (o tan mal) con ciertos signos. Es una brújula emocional, mental y social.
