Parteras tradicionales piden garantías al derecho de mujeres, niños y niñas de las comunidades
La Partería Tradicional es un oficio milenario, una labor ancestral, cultural y vital en las comunidades, en Chiapas el movimiento de parteras de Chiapas “Nich ixim” que significa “Flor de Maíz” que aglutina a cerca de 600 parteras distribuidas en 45 municipios de Chiapas levanto la voz pidiendo garantías a su labor y garantías al derecho de mujeres, niños y niñas de las comunidades en las que trabajan esto en el marco del día internacional de la partera.
Las parteras reunidas señalaron que el pasado 04 de marzo del 2025 fue publicada en el diario oficial de la federación la NORMA Oficial Mexicana NOM-020-SSA-2025 que es una amenaza a la existencia de esta labor detallaron que en primer lugar, desconoce los avances que la Ley General de Salud estableció en relación con la partería tradicional en la reforma aprobada el 26 de marzo de 2024; y, segundo, porque se basa en un modelo biomédico que impone requisitos de control, regulación y condicionamiento a la partería tradicional como el Registro Nacional de Partería (RENAPA) que no considera nuestros saberes ni formas de atención, e imposibilita el que los niños y niñas atendidos por estas mujeres, accedan a su acta de nacimiento.
Rosa Hernnadez Giron partera desde hace más de 50 años en el municipio de Comitán de Domínguez “Desde que iniciamos como Movimiento, hemos denunciado la discriminación histórica a la que hemos sido sometidas como parteras tradicionales. Consideramos que la nueva Norma es un capítulo más de las regulaciones que ponen en peligro la supervivencia de la partería tradicional en México, Por ello alzamos nuestra voz mas fuerte que nunca para que escuchen nuestra exigencia, demandamos seguir atendiendo partos en nuestras comunidades, y no solo ser canalizadoras de mujeres hacia las clínicas y hospitales con mis están imponiendo, exigimos el reconocimiento legitimo y proteccion de la partería tradicional por ser parte de un sistema de salud propios de las comunidades indigenas equiparables y afrodescendientes “.
Sebastiana Vazquez mujer indígena de habla tzeltal del municipio de Ocosingo desde hace 46 años señalo que han habido avances en el reconocimiento de su labor pero que también existen obstáculos “Respeto horizontal al trabajo de las parteras, el reconocimiento de la medicina tradicional y la aceptación de la constancia de nacimiento al registro civil (…) el reconocimiento Economico de las parteras por la aportación del trabajo hacia esto que le corresponde la estado(…)el problema es que la secretaría de salud quiere imponer todo el certificado de nacimiento en el hospital pero el registro civil no está, la ley del registro civil no es, hay tres maneras de registrar que es la constancia de la partera, la constancia que puede extender los agentes municipales, la autoridad municipal y eso no se está respetando sino más bien hay una imposición de a la fuerza el certificado de nacimiento”.
La problematica en Chiapas es que existen comunidades apartadas y de poca accesibilidad a cinco o siete horas de una agencia municipal por lo que existen niños y niñas que no pueden estudiar o casarse ante la falta de actas de nacimiento porque son lugares que reconocen y respaldan a sus parteras.
